La Junta de Comunidades está convencida de que la solución para recuperar Las Tablas es el Plan Especial del Alto Guadiana, gracias al cual, este año ya han subido 2 metros los niveles. Según Guijarro los trasvases no solucionan nada porque el agua que se lleva a las Tablas apenas dura quince días.
¿Dónde creen que se irá ese agua? Es evidente que si se filtra por el camino va al acuífero, y si se hipercola una vez en Las Tablas va también al acuífero. La que se evapora creo que no se puede considerar perdida pues entra en el ciclo natural del agua.
Ahora el PEAG les viene al dedo para combatir la amenaza de los ecologistas de descatalogar Las Tablas de Daimiel como Reserva de la Biosfera. Pero lo de la descatalogación es una auténtica patraña. Cuando los ecologistas amenazan con denunciar en Bruselas el estado calamitoso en que se encuentran las Tablas de Daimiel para que se les quite la categoría de Reserva de la Biosfera, están manipulando la realidad. Las Tablas no pueden perder esta categoría porque la Reserva de la Biosfera de la Mancha Húmeda no afecta solamente a Las Tablas, sino que engloba a todo el conjunto de lagunas y humedales situados en los 16.000 kilómetros cuadrados que abarca el Alto Guadiana.
La Reserva de la Biosfera de la Mancha Húmeda fue creada en 1980 y en ella se incluyen casi todas las lagunas situadas en el Alto Guadiana (provincias de Ciudad Real, Toledo, Cuenca y Albacete), entre las que se encuentra uno de los pocos ejemplos de llanura de inundación de Europa, Las Tablas de Daimiel, que a su vez son Parque Nacional desde 1973. En esta Reserva de la Biosfera hay diversos tipos de lagunas y humedales, algunos permanentes como las Lagunas de Ruidera, otros estacionales o efímeros, unos con aguas dulces, otros hipersalinos, alimentados por aguas de diferente procedencia: lluvia, ríos o arroyos, o rebosaderos de aguas subterráneas. Y fue precisamente esta diversidad de tipologías de lagunas y humedales lo que motivó su declaración como Reserva.
Las Tablas (pincha aquí para dar un paseo en barca por ellas) no pueden perder de forma aislada su categoría de Reserva de la Biosfera, porque esta calificación se refiere a todo el conjunto de lagunas y humedales del Alto Guadiana. Si se retira esta categoría se retirará a todas las lagunas, algunas de las cuales son, a la vez, Zona Ramsar por su interés biológico y ambiental, y otras estan propuestas para serlo (Ramsar es una convención internacional por la que los estados miembros se comprometen a trabajar por la protección de los humedales integrados en su lista).
Otra cosa es que se pida que Las Tablas dejen de considerarse Parque Nacional, y entonces hablaríamos de fracaso en el empeño de mantenerlas o restaurarlas, ya que entonces quedarían desprotegidas, abandonadas y condenadas a una segura desaparición.
De la misma forma que las agresiones y la degradación se han ido produciendo paulatinamente, la recuperación y conservación de la diversidad biológica tiene que plantearse desde nuevos modelos de gestión diseñados a largo plazo y basados en las condiciones ambientales y climáticas.
Pero no pueden ser descartados los trasvases como mecanismo de recarga ya que de alguna manera habrá que compensar el cese de aportaciones naturales al acuífero. No se pueden cargar todas las tintas sobre los agricultores y su desmedido afán depredatorio. Del acuífero se ha estado sacando agua para el regadío, pero también para abastecimiento de las poblaciones de la Mancha, que cada vez necesitan mas agua, y para los usos industriales (en cada pueblo se ha construido un polígono industrial). Y simultáneamente se han hecho pantanos en las cabeceras de los ríos que aportaban la recarga natural.
Ahora, la "única" solución posible, según Guijarro y Cia. es que el sector agrario reduzca a la mitad su actividad, o, lo que es lo mismo, que desaparezca la mitad de la población del entorno rural.
Ahora el PEAG les viene al dedo para combatir la amenaza de los ecologistas de descatalogar Las Tablas de Daimiel como Reserva de la Biosfera. Pero lo de la descatalogación es una auténtica patraña. Cuando los ecologistas amenazan con denunciar en Bruselas el estado calamitoso en que se encuentran las Tablas de Daimiel para que se les quite la categoría de Reserva de la Biosfera, están manipulando la realidad. Las Tablas no pueden perder esta categoría porque la Reserva de la Biosfera de la Mancha Húmeda no afecta solamente a Las Tablas, sino que engloba a todo el conjunto de lagunas y humedales situados en los 16.000 kilómetros cuadrados que abarca el Alto Guadiana.
La Reserva de la Biosfera de la Mancha Húmeda fue creada en 1980 y en ella se incluyen casi todas las lagunas situadas en el Alto Guadiana (provincias de Ciudad Real, Toledo, Cuenca y Albacete), entre las que se encuentra uno de los pocos ejemplos de llanura de inundación de Europa, Las Tablas de Daimiel, que a su vez son Parque Nacional desde 1973. En esta Reserva de la Biosfera hay diversos tipos de lagunas y humedales, algunos permanentes como las Lagunas de Ruidera, otros estacionales o efímeros, unos con aguas dulces, otros hipersalinos, alimentados por aguas de diferente procedencia: lluvia, ríos o arroyos, o rebosaderos de aguas subterráneas. Y fue precisamente esta diversidad de tipologías de lagunas y humedales lo que motivó su declaración como Reserva.
Las Tablas (pincha aquí para dar un paseo en barca por ellas) no pueden perder de forma aislada su categoría de Reserva de la Biosfera, porque esta calificación se refiere a todo el conjunto de lagunas y humedales del Alto Guadiana. Si se retira esta categoría se retirará a todas las lagunas, algunas de las cuales son, a la vez, Zona Ramsar por su interés biológico y ambiental, y otras estan propuestas para serlo (Ramsar es una convención internacional por la que los estados miembros se comprometen a trabajar por la protección de los humedales integrados en su lista).
Otra cosa es que se pida que Las Tablas dejen de considerarse Parque Nacional, y entonces hablaríamos de fracaso en el empeño de mantenerlas o restaurarlas, ya que entonces quedarían desprotegidas, abandonadas y condenadas a una segura desaparición.
De la misma forma que las agresiones y la degradación se han ido produciendo paulatinamente, la recuperación y conservación de la diversidad biológica tiene que plantearse desde nuevos modelos de gestión diseñados a largo plazo y basados en las condiciones ambientales y climáticas.
Pero no pueden ser descartados los trasvases como mecanismo de recarga ya que de alguna manera habrá que compensar el cese de aportaciones naturales al acuífero. No se pueden cargar todas las tintas sobre los agricultores y su desmedido afán depredatorio. Del acuífero se ha estado sacando agua para el regadío, pero también para abastecimiento de las poblaciones de la Mancha, que cada vez necesitan mas agua, y para los usos industriales (en cada pueblo se ha construido un polígono industrial). Y simultáneamente se han hecho pantanos en las cabeceras de los ríos que aportaban la recarga natural.
Ahora, la "única" solución posible, según Guijarro y Cia. es que el sector agrario reduzca a la mitad su actividad, o, lo que es lo mismo, que desaparezca la mitad de la población del entorno rural.
1 comentario:
Para el señor Guijarro, el PEAG es la panacea, hasta milagroso,pues antes de ponerlo en marcha ya el nivel de las Tablas de Daimiel ha subido 2 metros.
¿No será el ciclo natural?,en otoño e invierno es normal que los niveles suban y en verano bajen. !esto lo hemos estudiado en primaria con la climatologia, el caudal de los rios, etc. No se que pensar, si este señor nos toma por tontos,o no da más de si.
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