A pesar de que el Secretario de Estado de Agricultura, Sr. Puxeu, aseguró el pasado 26 de agosto en Tomelloso que el Gobierno de España podía poner en marcha mecanismos de mercado, como la destilación de crisis, para evitar la caída de los precios de la uva y el vino, todo indica que el hundimiento es mas que probable ya que, mediada la vendimia, aún se desconocen tanto el porcentaje de producción que podría ir destinado a la destilación, como las ayudas que ésta pudiera llevar aparejadas.
Ya dijimos entonces que el Sr. Puxeu no había convencido a los viticultores, y los dirigentes de Asaja que, en aquél día celebraban el Día del Viticultor, hacían nuevamente un acto de fe sin fundamento, máxime cuando unos días antes, el 13 de agosto las organizaciones agrarias, con el beneplácito de
Las cooperativas trasladaron al Consejero de Agricultura "la incertidumbre y preocupación existente por la entrada en vigor de la OCM del Vino, sin saber aún qué vamos a hacer con los subproductos o cómo se va a gestionar la ayuda acoplada a la destilación de uso de boca". Además trasladaron la necesidad de que la Consejería interceda para que el precio de referencia para la destilación "nunca sea inferior a 1,60 euros/hectogrado, si es que lo que realmente queremos es mantener la renta de nuestros viticultores", "sólo a este precio de referencia se podría mantener el precio mínimo que se percibía con la anterior OCM vitivinícola para ese mercado". Ucaman aclaraba que lo que ha trasladado a la Consejería ha sido una estimación sobre el precio de referencia, y no una fijación de precios del mercado. Respecto a la firma del acuerdo único del sector vitivinícola castellano-manchego, Ucaman aclaró que no respaldó el texto porque las negociaciones aún no están cerradas y la posición de los alcoholeros no permite un acuerdo final.
Ahora los de Asaja claman por la intervención del Ministerio de Medio Ambiente, Rural y Marino, y reclaman la mediación del Gobierno central para que se garantice la destilación de 6,5 millones de hectolitros, una cifra similar a la de la campaña anterior. Además, también le piden que ponga sobre la mesa más de 100 millones de euros para que los viticultores reciban una ayuda por hectárea que se destila de 700 euros.
La destilación de alcohol de uso de boca ayuda a equilibrar el mercado de vino en España. De la producción que tendrá el país de 40 millones de hectolitros, cinco se producen de mosto, 12 de vinos de calidad y 23 de vino de mesa, entre los que se incluyen los 6,5 que se suelen venir dedicando a la destilación.
El sector productor teme que si a estas alturas del año no se garantiza esa cantidad de producción y las ayudas, el precio de la uva acabará cayendo y arrastrando al sector. Como, además, las actuales existencias de alcohol destilado son suficientes para las necesidades de la próxima campaña, es seguro que los alcoholeros no tendrán prisa por comprar y esperarán a que bajen los precios y las condiciones.
