ES EXAGERADO HABLAR DE GUERRA DEL AGUA

Según Aaron Wolf, geografo estadounidense, es improbable que se produzca una verdadera guerra por el agua. Sería mas adecuado, según el informe de la Unesco, hablar de crisis del agua, provocada por la instrumentalización que los politicos hacen de este recurso. En la España de las autonomías se ha llegado a la aberración de "blindar los ríos" y de ponerles a los trasvases "fecha de caducidad".

Pero el blindaje de los ríos va en contra del desarrollo, de la creación de riqueza y empleo al servicio de las clases populares y de todas y cada una de las comunidades autonómicas, ya que al ser el agua imprescindible, no sólo para satisfacer las necesidades de la población, sino para el desarrollo económico del conjunto del país, exige una gestión coordinada de los recursos. Garantizar agua en cantidad, calidad y a un coste accesible en todos los rincones y a todos los ciudadanos en todas y cada una de las nacionalidades y regiones de España, debería ser el papel del Estado.

El agua no es de determinadas regiones, sino de todos los habitantes de la península. El agua es de todos. El agua fluye, no está quieta, el agua no es de los lugares por donde pasa, sino del conjunto de la población, y debe estar para cubrir las necesidades de todos.

Somos agua -ya lo decia el chino del anuncio "be water my friend"-, aunque agua con poco sentido común cuando hablamos de agua.

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Han pasado casi mil años desde que Parakrama Bahu I, rey de Sri Lanka dijera esta sabia frase: "Impidamos que una sola gota de agua que caiga en la tierra llegue al mar sin haber servido a la gente.”(1153-1186)