La Comisión Europea ha hecho publico el presupuesto para la subvención por arranque de viñedos en la actual campaña. La cuantía total para España asciende a 236 millones de euros, es decir el 34,5% de los 464 previstos para toda la Unión Europea en este concepto.
A Castilla-La Mancha está previsto que llegue el 68% del total asignado a España, es decir unos 160 millones de euros, lo que permitiría arrancar una cifra aproximada de 30.250 hectáreas en la región, es decir, un 45,9 por ciento menos de la superficie para las que se ha solicitado la ayuda.
La Comisión Europea se ha visto obligada a conceder a los países solamente el 45,9 por ciento de los fondos que solicitaron para la subvención del arranque, ya que el presupuesto global requerido ha rebasado el previsto para la medida, por lo que ha decidido aplicar exactamente el mismo recorte a todos ellos.
Según el Fondo Español de Garantía Agraria (FEGA), en España 28.037 viticultores han solicitado el arranque de 98.115 hectáreas de viñedos, por lo que España se convierte en el primer país receptor de estas ayudas, las cuales permitirán arrancar, a nivel nacional, 45.010 hectáreas, un 45,9 por ciento de las 98.115 para las que se presentó la solicitud.
Según el procedimiento establecido, la Consejería de Agricultura y Desarrollo Rural debe, ahora, comunicar a los solicitantes las asignaciones de hectáreas y las primas de arranque correspondientes.
En el caso de que alguno de los viticultores quiera renunciar, puede hacerlo hasta el 15 de diciembre.
Posteriormente, antes del 1 de febrero de 2009, se remitirán las resoluciones de las solicitudes admitidas, indicando la cuantía definitiva de la prima y la fecha límite de arranque que no podrá ser posterior al 1 de abril de 2009.
Una vez hechas las comprobaciones pertinentes por parte de la Administración, se procederá al pago de las primas, que deberán ser satisfechas antes del 15 de octubre de 2009.
Nos tememos que esto del arranque de viñedos en Castilla-La Mancha (y probablemente en otras regiones españolas) se ha regulado tan mal como se hizo la reestructuración del viñedo. La Comisaria Europea, Mariam Fischer Böel, pretendía con esta medida que se arrancaran las viñas más productivas para eliminar parte de los excendentes. Pero tal como se ha regulado aquí, las que antes van a ser arrancadas son las viñas menos rentables, las menos productivas, las mas viejas, y, probablemente, las de más calidad.
El Director General del Observatorio del Vino, Rafael del Rey, se muestra preocupado con la sobre-producción y piensan que sólo la viña de alta calidad tiene futuro, por lo que desde ese organismo están muy decepcionados con los reglamentos de aplicación de la OCM en España, ya que facilitan el arranque de viñas viejas y favorecen que se mantengan viñas nuevas de altísimo rendimiento, con nuevos marcos de plantación, nuevos sitemas de conducción en espaldera, nuevos sistemas de poda, fertirrigación, etc), que están inundando el mercado de miles de toneladas de uvas, de variedades pretendidamente "mejorantes" pero sin gran éxito en la comercialización.
Contrariamente a lo que se pretendía con la última reestructuración. Así vemos que hoy se cotiza en La Mancha mejor la uva airén que muchas de las nuevas variedades "mejorantes". En cambio, las viñas viejas, que serán arrancadas por su falta de rentabilidad, son las que suelen encerrar las claves de calidad, concentración, terruño y personalidad, precisamente por su baja producción.
